Un día para los amigos

Hoy fue el último día que vería a mis amigos antes de irme a NY y no volverlos a ver hasta que regresemos a clases, así que debimos aprovecharlo al máximo, y creo que así fue.

Comenzamos con unas retas generales en Wii: Strikers, las olimpiadas Mario/Sonic y las carreras de Donkey Kong donde tienes que golpear las congas...

Fueron unas retas dolorosas, los 4x100 planos en las olimipiadas fueron una verdadera tortura; los últimos 100 metros estabamos quejandonos de dolor, jajajajajaja.

Después de nuestras 3 hrs de juego, fuimos a un buffet a tener nuestra cena sin propósito alguno a celebrar... algo...

Al principio, parecía un concurso para ver quien era el que más comía, pero César se rindió primero y Hugo le siguió... claro, yo gané, jajajajaja, con tremendo cuerpesote, sería raro que alguien me ganara a comer, lo peor es que Iraís me ganaba...

Ya al final, comenzamos a planear nuestro siguiente paso, y terminamos viendo Encantada a las 9pm muriendonos de la risa por cualquier pendejada que saliera, fácilmente nos callaron como 4 veces.

Pero lo mejor pasó al final. Ya cuando por fin nos íbamos a nuestras casas, que el carro de César no arranca, y comenzamos a empujarlo, pero seguía sin correr.

Tanto lo empujamos, que hasta bajamos algo de la cena que nos echamos, pero seguía sin arrancar el auto.

En el borde de la desesperación, y siendo casi media noche, un señor nos ayudó a prenderlo y nos fuimos corriendo de ahi, tanto que por un momento pensamos que se nos había perdido la caratula del radio, jajajajajaja.

Este día fue toda una locura, digna para que no los vea en casi dos meses.

Por cierto, Adrián me regaló un dragón de plomo super genial, tendré que comprarle algo allá, jajajajaja.